No tiene mucho sentido volver a presentarooslos, soy ya “conocidos del Blog”, solo tenéis que hacer click aquí para ver su preboda (culpable de que nos quedara la espinita clavada de la nieve) y su boda la podéis ver haciendo click sobre estas palabras.
Ainara y Rubén. Cuando hablo con mis parejas en mi trabajo como fotógrafo de bodas en Bilbao, bueno, y en muchas mas sitios, siempre digo lo mismo: NO ME GUSTAN las postbodas. La razón es simple, la emocionalidad del día, no es la misma, las caras, no son las mismas y aunque mole la idea de ponerse otra vez la ropa, los complementos, que nos vuelvan a maquillar y peinar etc, si por un lado se busca un estilo mas fotoperiodistico, no le veo mucho sentido a forzar la maquinaria de las fotografías posadas, a menos que el propio día de la boda no podamos hacerlo con unos mínimos por…yo que se…encontrarnos en un lugar quizá muy céntrico y urbano y nos gustan las fotografías en el campo…o por que se nos echa el día encima y no nos da tiempo de hacerlo con una luz “decente”…en fin, que hay situaciones y hay situaciones.
Pero con ellos la razón fue distinta. Cuando la preboda la íbamos a hacer en la nieve, acabamos haciéndola a mediados de febrero con una puesta de sol increíble en la costa que parecía que estábamos en Málaga … la gracieta de una cosa llevó a la otra, y así, aunque ya hubieran pasado bastantes meses desde el día de su “Sí, quiero” nos plantamos en un paisaje muy diferente al que estamos acostumbrados, cerca de la estación de esquí de Altocampoo, en Cantabria y luciendo las mismas galas que el día (bueno…uno de los, que ellos tuvieron dos) B en cuestión…
Resumiendo: Nos lo queríamos pasar bien. Y punto.
Vestido: Alicia Rueda Atelier
