Siempre es un placer que te escojan para una sesión de fotografía intima Boudoir.
Lo es, porque te están confiando un recuerdo super-intimo, mujeres reales, mujeres que desean tener un recuerdo especial sea por la razón que sea, un cambio de look, unas fotografías sensuales para la vez que decidieron ponerse delante de una cámara, el ir a ser mamas, o ya haberlo sido…
Pero hay sesiones en las que ese placer se convierte en algo mas personal y especial.
Este es el caso. Porque a esta super-bella-mujer, además de poder llamarla clienta, la puedo llamar amiga, y es cierto que muchas veces precisamente ese tipo de relación hace que no nos atrevamos a pedir una sesión fotográfica así, cuando en realidad, debería ser al contrario. Por eso trabajar con ella ha sido un placer. Por eso sacar su lado mas sensual, mas intimo, mas femenino, mas dulce, mas romántico y mas sexy ha sido un verdadero placer.
Ella es Pilar, toda una mama y currela de los pies a la cabeza, una persona a la que como he dicho puedo llamar amiga porque “venia en el lote” de esas personas a las que gracias a mi mujer he podido añadir a ese circulo personal.
No íbamos a dejar nada al azar para esta sesión. Las cosas bien claras, no había que sacar a quien no era, ella es dulce, así que hubo dulzura, a raudales. Ella es luz, así que la luz con la que trabajamos debía ser abundante, pura y natural, como ella. Escogí como localización una de las maravillosas Junior Suites del precioso Miró Bilbao y detrás de su maquillaje están las habilidosas manos de Cris Casas Beauty & Make up.
Me ha sido difícil escoger las fotografías para mostraros esta sesión de fotografía intima Boudoir en Bilbao, porque hay mucha luz humana en ellas, pero creo que con este resumen… ¡Os podéis hacer una idea perfectamente!
Localización: Hotel Miró Bilbao
MUAH: Cris Casas Beauty & Make Up
